El repertorio de nuestro adiós/corazón.

Me sentaré al piano intentando descubrir por qué.

Tocaré las canciones más largas del mundo para distraerme y no pensar en esto, o en lo otro que inconscientemente me está llevando la juventud.

No volverme loco intentaré sin dolores en el pecho (aunque ahora no pueda respirar).

Y es que me siento absurdo, incompetente, despreocupado, imaginando qué vendrá mañana de ti, o de mí para no hacernos más daño.

Chichi Peralta lo quedó bien claro: es un dilema del que ni tú ni yo podemos escapar.

¿Podremos o iremos a naufragar a las Playas de Islas?

Ay, mi María la portuguesa, las cosas que nos vamos a perder por no saber entendernos...